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Deficiencia de vitamina D: ¿qué pasa en nuestro cuerpo?


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La deficiencia de vitamina D puede afectar nuestra salud y bienestar, ya que puede incidir en enfermedades como la  osteoporosis o cáncer (Marazuela, 2005). Por eso, te explicamos por qué es importante esta vitamina, cuáles son sus funciones en tu cuerpo, en qué alimentos las puedes encontrar, cuándo hay deficiencia y cómo puedes cuidarte. 

¿Qué es la vitamina D y cuáles son sus funciones? 

La vitamina D es una vitamina liposoluble (se disuelve en grasa) y la principal fuente de esta vitamina es la exposición a la luz solar y se produce en los riñones y a través de la piel gracias a la exposición solar (Marazulea, 2005). 

Según MedLinePlus (2019) algunas de sus funciones son:

  • Mantener fuertes los huesos y dientes.
  • Mejorar la absorción de calcio y fósforo a nivel intestinal.
  • Fortalecer y promover la producción de células del sistema inmunológico. Asimismo, controlar procesos inflamatorios.
  • Fortalecer músculos y ayudar a mantener su forma.
  • Mejorar la comunicación entre las neuronas en el sistema nervioso.
  • Ayudar a prevenir el cáncer de colón, mama y próstata. 

¿Por qué se produce la deficiencia de vitamina D?

Como puedes ver, son varias las funciones que esta vitamina tiene en nuestro cuerpo. Por ello, si hay deficiencia de vitamina D, debes prestar atención. Según Miranda (2009), algunos de los factores que pueden causar esto son:

  • Escasa exposición solar.
  • Uso de bloqueadores solares con alto filtro solar.
  • Enfermedades digestivas.
  • Medicamentos que evitan la absorción de vitamina D.
  • Obesidad.
  • Estaciones del año con poca luz solar.

En general, y de acuerdo con algunos expertos, se considera que deficiencia de vitamina D cuando se encuentran valores en la sangre menores a 20ng/ml. Eso es porque se considera un valor normal los mayores a 30 ng/ml. Sin embargo, lo ideal es que sea un especialista que verifique y haga seguimiento (Torres del pliego, 2014). 

¿Cómo se corrige la deficiencia de vitamina D?

Una manera natural de producir la vitamina D en nuestro cuerpo es por medio de la exposición solar. Se recomienda que se realice entre las 10 am y 3 pm, con bloqueador de bajo filtro y una duración de 5 a 15 minutos (Daisy Miranda C, 2009). 

Pero hay casos en los cuáles se deben tomar suplementos de vitamina D, ya que no es suficiente únicamente con la exposición solar y las fuentes alimentarias; sin embargo, se trata de casos especiales. Un médico especialista es quien determinará la frecuencia y la cantidad de suplementos que serán necesarios para mejorar la deficiencia de vitamina D. 

Consecuencias de la deficiencia de vitamina D

La baja presencia de esta vitamina en el cuerpo puede ocasionar algunos problemas de salud.  Por ejemplo, la deficiencia de vitamina D en adultos puede ocasionar (Marazulea 2005; Miranda, 2009):

  • Osteoporosis o osteomalacia (huesos débiles, con posibilidad de fracturas).
  • Pérdida de dientes.
  • Infecciones recurrentes.
  • Falta de concentración y problemas de memoria.
  • Fatiga.

Por otro lado, en los niños puede ocasionar:

  • Raquitismo (huesos débiles y forma anormal).
  • Baja talla.
  • Problemas de aprendizaje.
  • Infecciones urinarias recurrentes.
  • Problemas gastrointestinales. 
  • Enfermedades en la piel.

¿Cuáles son las fuentes alimentarias de vitamina D?

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Una de las formas para mejorar la deficiencia de vitamina D es la ingesta diaria de una porción de alimento que contenga una cantidad considerable de esta vitamina. Entre las principales fuentes de origen animal encontramos (National Institutes of Health, 2020): 

  • Pescados grasos como, por ejemplo, salmón, atún y la caballa. 
  • Aceite de bacalao.
  • Hígado vacuno.
  • Lácteos en todas su presentaciones y mantequilla. 
  • Yema de huevo.

Ahora, las fuentes de vitamina D de origen vegetal son pocas, pero te recomendamos los siguientes alimentos:

  • Champiñones expuestos a luz ultravioleta.
  • Aguacate.
  • Cereales fortificados.

Cabe resaltar que los productos de origen vegetal (específicamente de cereales), como la leche de soya y tofú, están suplementados con vitamina D. Al consumirlos, te ayudarán a mantener los niveles de vitamina que requiere tu cuerpo (St. Jude Children’s Research Hospital, s.f.). 

Ahora que ya sabes más acerca de la deficiencia de vitamina D, te invitamos que consumas estos alimentos con la aprobación de tu nutricionista y disfrutes el sol. Recuerda que estas son algunas de las maneras de prevenir enfermedades en tus huesos y otros órganos.  


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