Claves para crear comidas saludable y divertidas para tus hijos

Dar de comer a los niños representa un reto para los padres, en especial cuando deseamos darles comidas saludables. Los alimentos naturales nos aportan los nutrientes esenciales para cada etapa del desarrollo. Afortunadamente, también en el mercado existen diversas opciones para ayudar a mejorar los hábitos alimentarios de los más pequeños.

En esta oportunidad te contamos cuales son las comidas que no deben faltar en la dieta diaria de los niños. Además, te enseñamos a combinar alimentos para cada comida del día. Para aprovechar al máximo el valor nutricional de los alimentos, es necesario consumir productos variados. Por otro lado, es preciso aumentar la ingesta de ciertas comidas y disminuir otras. Veamos de qué se trata.

Lo que no debe faltar en la alimentación infantil

Los requerimientos nutricionales de los niños son similares en cualquier edad, lo que cambia con el tiempo es la cantidad de alimento que necesitan. La necesidad principal del cuerpo es la energía, los niños en especial gastan mucha. Además, según la FAO (2005), la energía en los niños es un factor determinante en su crecimiento, pues contribuye a la formación y reparación de los tejidos del cuerpo. La energía se mide en Kcal (kilocalorías) que encontramos en muchos alimentos.

Los bebés de cero a seis meses tienen asegurada su nutrición por medio de la leche materna. No obstante, a medida que comienzan a comer alimentos sólidos se van incorporando nuevos alimentos con el propósito de aumentar la ingesta de nutrientes. Mientras se encuentran en su primera etapa de infancia es el momento indicado para crear buenos hábitos alimenticios. Comencemos a formarlos asegurándonos de tener en casa los siguientes suministros:

Frutas y verduras
Yogurt
Queso
Galletas, panes y cereales integrales
Huevos
Frutos secos
Arroz, fideos
Lentejas, frijoles y garbanzos

De igual manera, en el mercado se hallan cientos de productos alimenticios para niños, los cuales ayudan a completar su dieta. Aunque de preferencia debemos optar por productos naturales, algunos alimentos procesados poseen cualidades beneficiosas para los niños. Con ingredientes de origen vegetal, por ejemplo, se pueden preparar comidas saludables y divertidas.

¿Cómo crear comidas saludables para los niños?

Las comidas de los pequeños tienden a ser sencillas porque estos no se sienten a gusto con preparaciones muy condimentadas y elaboradas. Por lo tanto, la alimentación diaria requiere de una combinación de alimentos adecuados para que su nutrición y desarrollo sean óptimos. Te ofrecemos algunas recomendaciones a continuación:

Desayunos

Combina frutas para los desayunos. Las frutas y verduras deben estar presentes todos los días y en todas sus comidas. Para facilitar el consumo de estos productos, es necesario que dispongamos de una variedad de ellos a fin de que los niños puedan elegir. Los especialistas recomiendan el consumo de cinco o más porciones de fruta al día, estas pueden ser frutas frescas, secas, enlatadas o congeladas. Una sugerencia puede ser:

Un lácteo, ya sea leche líquida, postres a base de leche, queso, yogurt o papilla láctea. La leche es un alimento básico en la dieta del niño. La FAO recomienda el consumo de 3 a 4 raciones diarias, lo cual equivale a unos 500 a 700 ml.
Una porción de cereal bajo en azúcar, galletas integrales o avena. Los cereales aportan fibra, proteínas y vitaminas. Son fuente principal de energía para cada día.

Comidas

Los almuerzos pueden incluir productos que aporten nutrientes como el zinc y el hierro. Para ello se recomiendan las lentejas, frijoles u otros granos. Los alimentos de este grupo deben consumirse dos veces al día. Otras fuentes de proteínas como los huevos también pueden incluirse en el menú. Veamos algunas alternativas:

Una porción de verduras combinadas. Prueba mezclar alimentos cocidos y crudos, a fin de mejorar la textura y el procesamiento. Los colores de estos alimentos también deben ser variados. Los vegetales más recomendados son la lechuga, la zanahoria, la espinaca, el tomate y el apio.
Una porción de proteína que puede ser soya, pollo, carne de pavo o pescado. Se recomienda eliminar la piel y elegir las carnes de suave sabor.
Una porción de alguna leguminosa, cereal, quizá fideos o arroz.

Refrigerios

Para los refrigerios se pueden suministrar alimentos que combinen galletas integrales, snacks que tengan aportes nutricionales y queso. El yogurt es también una alternativa saludable, que además aporta calcio. Las verduras cocidas también sirven como acompañantes para la mantequilla de maní. Una sugerencia:

Una fruta mediada cortada en trozos o una papilla o compotas de frutas frescas hechas en casa. Las frutas más recomendadas son el kiwi, la papaya, las bananas y las manzanas.

Cenas

Los alimentos que deben comerse en todas las comidas son las verduras y las frutas. Por tal motivo, las cenas ayudan a completar las porciones de otros alimentos que hagan falta. Verduras hervidas, a la parrilla o al vapor son siempre más recomendables que las frituras. Incluye lácteos bajos en grasa y combínalos con cereales, frutos secos, pan o galletas integrales. Un plato para la cena puede incluir:

Una porción de plátano asado
Una porción de arroz
Huevos revuelos con espinacas.

Las anteriores recomendaciones sirven para combinar y crear comidas saludables para los niños. La cantidad de ingredientes de las comidas que les suministramos debe estar acorde a la edad del niño. De igual manera, es conveniente adecuarlos si el pequeño aún no ha pasado a la ingesta de alimentos sólidos enteros.

Alimentos que debemos limitar o equilibrar

Para reducir la ingesta de alimentos altos en grasa o azúcares, es muy conveniente vigilar la preparación de estos. Por ejemplo, al evitar freír ciertos productos reducimos grasa innecesaria. De igual manera, el azúcar procesado puede sustituirse por el dulce natural de las frutas, Miel etc.; evitemos endulzar la leche, los cereales o las frutas frescas.

Las bebidas azucaradas y las gaseosas deben consumirse de manera muy limitada. Ofrece a los niños agua o leche descremada para completar sus comidas saludables.

Para obtener una ración de comida equilibrada es oportuno elegir un alimento de cada grupo nutricional. Es decir, evita platos que contengan alimentos con características similares. Por ejemplo, los vegetales entre si poseen nutrientes semejantes, los carbohidratos también y pasa lo mismo con las proteínas. En tal sentido, los especialistas recomiendan combinar distintos elementos en el mismo plato.

Sin embargo, en el caso de los niños no solo se trata de una cuestión de salud, sus comidas deben ser atractivas para ellos. Por lo tanto, conviene elegir los alimentos por sus colores y presentarlos de manera divertida. Vamos a disfrutar comidas saludables con los niños todos los días.